Entrevista con Luis Fernando Arboleda, presidente de Findeter
El Doctor Arboleda ocupa el cargo de Presidente en Findeter, una Banca de desarrollo que financia proyectos de infraestructura en cada una de las regiones de Colombia. Paralelamente, es miembro de las Juntas Directivas de múltiples asociaciones del país. Además, ha sido consultor del Banco Interamericano de Desarrollo, entre otras entidades, y gerente de empresas líderes en la prestación de servicios públicos. De 1985 a 1988 fue alcalde de Manizales y, en la misma ciudad, también fue gerente de empresas públicas. Esta amplia trayectoria laboral, compuesta por más de 30 años de experiencia en proyectos de infraestructura, proyectores sociales, económicos y políticos, se complementa con su formación de Administrador de Empresas en la Universidad Nacional de Colombia, con especialización en Alta Gerencia en la Universidad de los Andes.
A continuación, se adjunta una parte de la entrevista realizada al presidente de Findeter:
¿Cuál cree que es el mayor desafío que enfrentan las ciudades en Latinoamérica, concretamente en Colombia?
El mayor reto es, sin duda, la planificación de las ciudades en Colombia. Los alcaldes son elegidos para 4 años y no hay posibilidad de reelección, hecho que dificulta notablemente esta planeación de los territorios. Los planes de desarrollo de las ciudades son diseñados para 4 años y nadie piensa en proyectar las ciudades a 20, 30 o 50 años para solucionar la problemática fundamental de infraestructura sostenible, básica, estructural y social que necesitan estas ciudades.
Colombia tiene el 85% de la población concentrada en ciudades. El desplazamiento en los últimos 50 años del campo a la ciudad ha sido un proceso muy acelerado debido a la problemática de la violencia, hecho determinante en esta emigración desorganizada y sin servicios públicos.
El principal desafío es convencer a las administraciones regionales y al gobierno nacional para planificar ciudades a largo plazo, ciudades para la gente, dotadas de los servicios básicos. En Colombia, todos y sobretodo las clases más desfavorecidas, quieren vivir en Bogotá, Cali y Medellín. El objetivo que persigue Findeter es conseguir que la gente quiera seguir viviendo en sus municipios y ciudades.
Este afán de planificar se ve plasmado en nuestros proyectos Diamante Caribe y Santanderes, Ciudades Sostenibles y Competitivas y Ciudades Emblemáticas. Se trata de un proceso de planificación, priorización y ejecución y éste es nuestro gran reto en más de 60 municipios mayores de 100.000 habitantes en Colombia.
¿Cuál es el rol que juega la ciudadanía/sociedad civil en el desarrollo urbano?
Estamos proponiendo que no sea una planificación del alcalde, sino un plan de la ciudad y una planeación desde la ciudad. En muchos talleres que se realizan se invitan a los líderes de opinión y se hace una encuesta de percepción de la ciudad, donde se tiene en cuenta qué es lo que ésta quiere en relación a su desarrollo, para definir el ADN de la misma. Esto solo puede definirlo la ciudad en su conjunto.
El primer ejemplo es la ciudad de Bucaramanga, que, dentro de las 40 ciudades del BID, salió en primera posición como ciudad sostenible en los indicadores. Bucaramanga ha definido 3 objetivos muy claros a largo plazo: el tema del agua, relacionado con los buenos servicios públicos, la cuestión de la movilidad y, por último, la educación, base para llegar a la competitividad. Para ello, se hizo un plan de inversión de 550 millones de dólares para los próximos 10 años con los cuales se inaugura un acueducto, se sigue mejorando la movilidad gracias a las inversiones, se montan más de 50 laboratorios con la ayuda del dinero invertido en escuelas públicas y, con el sector privado, se define el cluster de la salud.
Bucaramanga ha definido que su ADN es la salud a partir de estos tres objetivos que pretenden generar talento para poder movilizar recursos en el área metropolitana. Adicionalmente, Bucaramanga apuesta por la reducción de la pobreza y por el cluster de la pequeña y mediana empresa así como las microempresas.
El segundo caso es Manizales, una ciudad donde yo tuve la fortuna de ser alcalde hace 25 años. Se hizo un proceso de planificación y se tomó una ruta basada en la ciudad del conocimiento, en la ciudad universitaria. Se ha estado trabajando siguiendo esta línea hasta el punto de construir el centro de biotecnología más grande de América Latina y duplicar la capacidad universitaria de la ciudad, todo ello pensando en llegar a ser una ciudad de innovación, educación y tecnología. Ya planificamos la ciudad y ahora estamos tratando de que la ciudad asimile toda esta información. Esta planificación fue posible gracias a que, entre las universidades y los líderes de opinión, salieron más de 70 iniciativas privadas, se crearon más de 220 empresas de pequeños jóvenes empresarios y se firmaron convenios con universidades internacionales.
Todos estos planes se pueden realizar siempre que vayan acompañados del sector privado y que el gobierno dé incentivos para su ejecución, al lado de una buena regulación.
La idea es que todo el mundo opine, todo el mundo participe y haya una gran voluntad del sector privado en apoyar las iniciativas del gobierno nacional.
¿Qué lecciones de Barcelona considera aplicables en Colombia?
Sobretodo aquello relacionado con los ríos y los puertos. Cartagena, Barranquilla y Santa Marta son ciudades que hemos traído a Barcelona: Aguas de Barcelona está manejando el acueducto de Cartagena, el Puerto de Cartagena tiene alianzas estratégicas con el Puerto de Barcelona, el exalcalde Jordi Hereu ha venido varias veces a Colombia y Esteyco ha hecho trabajos en Cartagena y, en el caso de Buenaventura, hicieron el Plan Maestro 2050. También trajimos la gente de Buenaventura a formarse en Barcelona. En el tema de Barranquilla hay ejercicios de renovación urbana y espacio público y, a nivel internacional, el alcalde de Montevideo va a hacer unos corredores verdes al lado del río, muy parecido a lo que tiene Barcelona.
Otro tema muy importante es la movilidad, que para nosotros es fundamental. Las cuestiones de espacio público, de la concentración y el ejemplo del 22@ son modelos que podrían ser ajustados a cada una de las ciudades que tiene el país.
Para nosotros Barcelona es un modelo a seguir en muchos de sus procesos urbanos.
